¿Quién dijo que un rayo no cae dos veces en el mismo lugar? Seguro que no fueron los fanáticos del tenis chileno, quienes vieron a su potencia, Nicolás Jarry, tener una fuerte actuación en el Brisbane International antes de quedarse corto en los cuartos de final. A pesar de los pronósticos deportivos desfavorables, Jarry ha estado rindiendo con solidez en el torneo, ganando sus dos primeros partidos en sets corridos. Este dinamizador de 29 años, conocido por su potente saque y su juego agresivo desde el fondo de la cancha, está decidido a volver a la elite del ATP Tour.
Midiendo 2 metros, Jarry imponía una figura intimidante en el Queensland Tennis Centre. El acierto chileno se llevó el partido contra Yoshihito Nishioka de Japón, 6-2, 6-7(5), 6-4, en un segundo partido lleno de acontecimientos el día de Año Nuevo. Su viaje finalmente llegó a su fin en los cuartos de final cuando se enfrentó a Jiri Lehecka de la República Checa. Lehecka se llevó el encuentro 6-4, 6-4 y avanzó a las semifinales, donde enfrentará a Grigor Dimitrov.
Carrera y momentos clave
El legado familiar es donde comenzó la odisea tenística de Jarry. Nieto del pionero del tenis chileno Jaime Fillol, el tenis casi corría por sus venas. Tuvo una auspiciosa carrera junior, alcanzando el número 8 en 2013 y llegando a la final de dobles masculinos del Abierto de Francia el mismo año.
El camino hacia el éxito profesional no fue nada fácil. Constantes lesiones marcaron sus primeros años, pero Jarry nunca perdió su determinación. Debutó en el cuadro principal de un ATP en 2015 en el Ecuador Open Quito, superando en primera ronda al jugador local Gonzalo Escobar.
Un punto de inflexión llegó en 2017. Jarry ganó tres torneos Challenger en Medellín, Quito y Santiago, entrando al top 100 del ranking ATP. Ese mismo año, debutó en un Grand Slam en el Abierto de Francia, superando la fase de clasificación.
Logros destacados
La potencia chilena sin duda tuvo un año revelador en 2018 cuando Jarry alcanzó su primera final de ATP en el Brasil Open y también ganó su primer título ATP en dobles junto a Hans Podlipnik-Castillo en Quito. También registró una victoria destacada sobre el primer sembrado Dominic Thiem en el German Open, consolidando así su reputación en el circuito.
El momento culminante llegó en 2019 cuando Jarry levantó su primer título ATP de singles en el Swedish Open, venciendo a Juan Ignacio Londero sin perder un solo set. Esta victoria lo impulsó a su entonces mejor ranking mundial, el número 38. A pesar de las lesiones y bajas en su rendimiento, la actitud combativa de Jarry lo tiene luchando por más.
Actuaciones recientes y retos futuros
Jarry se está preparando para el Abierto de Australia, que comienza el 12 de enero de 2025. Su participación en el Brisbane International sirve como una parte crucial de su preparación para este evento de Grand Slam. Saliendo de un ranking ATP más alto de su carrera, el número 16 del mundo en mayo de 2024, las lesiones detuvieron brevemente el progreso de Jarry. Ahora, clasificado en el número 35, Jarry ha puesto manos a la obra para tratar de volver donde estaba. El trabajo en el gimnasio y el esfuerzo mental han dado sus frutos.
Desde el polvo de ladrillo de Santiago hasta las canchas duras de Brisbane, Jarry ha demostrado que pertenece a los mejores del mundo. Su potente saque y juego agresivo pueden poner a prueba a cualquier oponente, aunque su carrera en Brisbane culminó en los cuartos de final. Los fanáticos del tenis chileno siguen apoyándolo con entusiasmo, creyendo que los mejores días de su estrella aún están por venir.